DELFÍN

El Golpe de Estado Militar de 1955 arrebata el poder a Perón quién se exila en Paraguay hacia dónde parte en la cañonera del mismo nombre, “Paraguay”.
Los militares argentinos, y en particular su ideólogo el Almirante Rojas, no lo querían dejar partir y planearon su muerte haciendo estallar la cañonera. Un bombardeo directo hubiera sido el origen de una nueva guerra con el país vecino, todo tenía que parecer un accidente. A los círculos navales ya habían llegado las experiencias de los delfines transportadores de explosivos utilizados en las modernas guerras navales. Pero aquí no había delfines y mucho menos entrenados que navegaran por el Paraná.
El Almirante Rojas que había participado en la experiencia del Robot Bagre, quiso superarlo y mandó construir con la urgencia del caso ,en los talleres de Córdoba cedidos por la Aeronaútica, el Robot Delfín para transportar los explosivos que dinamitaran el “Paraguay” con Perón adentro. Se enviaron sofisticados planos y un Manual Estrada de Fauna Antártica señalando el diseño del Delfín. Por razones que se desconocen, el señalador se perdió, y los ingenieros de la Aeronáutica, aparentemente tomaron otro modelo de animal antártico , poco familiarizados con todo lo que no vuela. Es así como el robot Delfín terminó con esa curiosa forma, que nadaba muy lentamente y llegó a Asunción una semana después de Perón, lo que no fue muy problemático porque el explosivo se mojó y no explotó.

El poco feliz atentado, se vió compensado por una importante innovación en la construcción de este robot, la introducción de los Pitones Estructurales que permiten el armado sin soldadura ni cementación.